ORIENTACIÓN Y ROCÓDROMO EN DEHESA DEL BOYAL
7 DE MARZO DE 2019
Esta actividad tuvo lugar en el Polideportivo Municipal Dehesa
Boyal el 7 de Mayo, donde realizamos escalada en el
rocódromo del Polideportivo y una práctica de orientación en el Parque Natural
de la Dehesa Boyal.
Para realizar esta actividad, mi amiga Eva y yo quedamos en la Univerisidad
con nuestro compañero Robinson para acudir al polideportivo todos juntos en
coche. He de reconocer que estaba un poco nerviosa ya que no había realizado
nunca escalada en un rocódromo. Además, iba con un poco de miedo debido a que,
desde pequeña he tenido pánico a las alturas. Pero, con todo esto, iba con
muchas ganas e ilusión de realizar por primera vez este deporte.
Hubo una primera actividad que consistió en una carrera de orientación por
grupos, en la que teníamos que encontrar 7 balizas que estaban colocadas por
todo el parque con la ayuda de un mapa y una serie de pistas. La segunda
actividad consistió en escalar en el rocódromo, pudiendo poner en práctica lo
aprendido en la clase de iniciación a la escalada en la
Universidad.
Me pareció correcta la organización de las tareas, ya que nos dividimos en
dos grupos para poder disfrutar completamente de ambas actividades. Este tipo
de organización es muy interesante si nos dedicamos al ámbito de la educación,
ya que los grupos de las clases normalmente son muy extensos y actividades como
las realizadas este día en el Polideportivo de la Dehesa Boyal, se sacan
provecho con escaso número de personas. Con esto, lo que se consigue es que los
monitores puedan prestar atención, corregir y ayudar a los alumnos en
todo momento.
La primera actividad me pareció correcta para tener entretenidos al grupo
que no estaba realizando la tarea de la escalada y para repasar los conceptos
ya aprendidos sobre orientación, brújula y mapa. Así mismo, pudimos conocer los
espacios que nos presenta el Parque Natural de la Dehesa Boyal y
familiarizarnos con las posibilidades para la práctica de actividad física en
el medio ambiente orientada hacia los centros educativos.
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| Foto con el mapa de la Dehesa Boyal |
Y por fin, acabada la carrera nos dirigimos hacia el rocódromo donde
estaban los monitores. En un principio nos estuvieron contando aspectos de
seguridad y nos enseñaron a realizar un 8 y doble 8. Esto me gustó saber
hacerlo porque el día que se realizó en clase no se explicó muy bien y no sabía
cómo hacerlo.
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| El monitor contándome aspectos importantes antes de subir |
Con nervios pero con ilusión me puse el casco y me decidí a subir. Antes de
nada, el monitor me contó varios aspectos a tener en cuenta y una vez esto,
para arriba. La verdad es que me costó un poco ya que había que tener bastante
fuerza en los antebrazos, pero conseguí subir hasta arriba. Me sentí bastante
orgullosa de mí misma ya que a pesar del vértigo, aguanté.
Tengo que destacar la profesionalidad de los monitores que tuvieron con
nosotros, ya que estuvieron todo el rato pendientes y nos ayudaron en cualquier
cosa que necesitábamos. Es de agradecer el trabajar con gente así, ya que de
cara en un futuro seremos nosotros los que estemos de cara al público y,
gracias a personas como ellos, nos podemos llevar un poquito de ellos e ir
aprendiendo poco a poco.
En resumen, me sentí muy orgullosa de mi misma y tuve un sentimiento de
superación, tanto en la actividad de la carrera de orientación como en la
escalada. Durante la orientación porque a pesar nos perdimos pudimos encontrar
algunas de las balizas. Y durante el rocódromo, no hay mayor superación que
superar tus miedos. A la vez, sentí emoción y curiosidad, ya que tenía muchas ganas
de realizar un deporte que no había hecho nunca.
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